Nos encontramos en un punto crítico en la lucha contra el cambio climático y la contaminación del aire. En la última década hemos sido testigos de los años más calurosos registrados en la historia, y la temperatura media de la superficie terrestre se acerca peligrosamente al punto de no retorno de 1,5 ºC. A esto se suma el gran impacto de los contaminantes atmosféricos y los gases de efecto invernadero en la salud humana. Según la OMS, 9 de cada 10 personas respiran aire altamente contaminado, y la Agencia Europea de Medio Ambiente estima que, en España, la mala calidad del aire puede causar más de 20.000 muertes prematuras.
En este contexto son de vital importancia las
Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), las cuales son cruciales para el punto de inflexión en el que nos encontramos, debido a la oportunidad que supone la implementación de Planes de Movilidad Sostenible, la transición energética y la descarbonización, en el camino hacia la transformación de nuestras ciudades en Smart Cities.
Las ZBE están reguladas por el Real Decreto 1052/2022, publicado el 28 de enero de 2022. Su objetivo es "mejorar la calidad del aire y mitigar el cambio climático, lo que resultará en una mejora de la salud de los ciudadanos y la calidad de vida urbana [...]". Además, la monitorización y seguimiento de la calidad del aire se llevará a cabo de acuerdo con los objetivos de calidad de los datos establecidos en el Real Decreto 102/2011, de 28 de enero.
La metodología con la que SUEZ aborda el diseño e implantación de ZBE, la cual es utilizada en el desarrollo del paper presentado durante al exposición, consiste en utilizar
modelos meteorológicos y de
dispersión a diferentes escalas, empleando técnicas de modelización de dispersión de contaminantes atmosféricos acopladas a modelos de demanda de tráfico para determinar las emisiones procedentes del mismo. Con esta combinación de modelos matemáticos se puede relacionar las emisiones producidas por el tráfico rodado con la calidad del aire que respiramos.
Con este sistema de modelo validado, como gemelo digital de la ciudad, es posible generar mapas de concentración de contaminantes antes de la implementación de medidas, y después de implementar restricciones y modificaciones en la movilidad de la ciudad. Con los resultados obtenidos se pueden validar las medidas a implementar, así como las zonas de bajas emisiones propuestas y se pudieron establecer objetivos de mejora realistas y alcanzables.